El Presidente de Uzbekistán pronunció el discurso en el 78º período de sesiones de la Asamblea General de la ONU
El 19 de septiembre comenzó en la Sede de las Naciones Unidas en la ciudad de Nueva York el debate político general del 78º período de sesiones de la Asamblea General de la ONU. En el evento habló el Presidente de la República de Uzbekistán, Shavkat Mirziyoyev.
El primer día, a los debates, encabezados por el presidente de la sesión, Dennis Francis, asisten el secretario general de la ONU, António Guterres, los líderes de los Estados miembros: los presidentes de los Estados Unidos de América, Joseph Biden, la República Federativa de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el presidente de la República de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, la República de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, el emir del Estado de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, y los jefes de otros estados.
En su discurso, el Presidente de la República de Uzbekistán, Shavkat Mirziyoyev, afirmó la necesidad de preservar el espíritu de armonía y cooperación práctica, de unir a los países sobre la base de que los intereses comunes son superiores a las contradicciones existentes.
“El año pasado lanzamos la “Iniciativa de Solidaridad de Samarkanda” para la seguridad y el desarrollo comunes. Nuestro principal objetivo es comprender plenamente la responsabilidad por el presente y el futuro de nuestros países y pueblos y entablar un diálogo global con todas las partes dispuestas a una cooperación abierta y constructiva”, afirmó el líder de Uzbekistán.
Se expresó confianza en que la celebración de una Cumbre del Futuro el próximo año por iniciativa del Secretario General de la ONU servirá para abordar los desafíos actuales del desarrollo internacional y regional y aumentar la influencia y eficacia de la Organización.
El Presidente de Uzbekistán se centró principalmente en las reformas irreversibles y de gran escala llevadas a cabo en los últimos años en Uzbekistán y presentó varias iniciativas destinadas a resolver los problemas más urgentes de la agenda global y regional.
“Seguimos comprometidos a continuar nuestra política de crear un Nuevo Uzbekistán, un Estado social, democrático y gobernado por la ley. Nuestro país sigue con valentía el camino de reformas fundamentales encaminadas a fortalecer los principios de la democracia y la justicia, basándose en la noble idea de "en nombre de los valores e intereses humanos", señaló el Presidente.
Se señaló que el referéndum nacional celebrado en Uzbekistán sobre la Constitución renovada determinará las prioridades de desarrollo nacional. En la Ley Básica se reafirma el compromiso con los principios de igualdad de todos los ciudadanos, los derechos humanos y la libertad de expresión y de conciencia, independientemente de la nacionalidad, el idioma y la religión. La Estrategia de Desarrollo “Uzbekistán – 2030”, adoptada sobre esta base jurídica, está en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
El Presidente de Uzbekistán señaló que a pesar de los desafíos globales, Uzbekistán muestra un crecimiento constante. En los últimos seis años, el producto interno bruto ha crecido más de 1,5 veces. El principal objetivo es duplicar esta cifra de aquí a 2030.
Otra prioridad de nuestra liberalización económica es convertirnos en miembro de pleno derecho de la Organización Mundial del Comercio en un futuro próximo.
Desde 2017, la pobreza en el país se ha reducido a la mitad gracias a las políticas destinadas a mejorar el nivel de vida de las personas. Está previsto reducirlo al 7 por ciento para 2030.
“Apoyamos la iniciativa del Secretario General de la ONU Acelerador Global para el Empleo y la Protección Social. Para compartir las mejores prácticas en el marco de esta iniciativa, proponemos celebrar en 2024 en nuestro país la Conferencia Mundial “Protección social: el camino hacia el desarrollo” bajo los auspicios de las Naciones Unidas”, dijo el líder de Uzbekistán.
A los participantes de la reunión se les presentaron los resultados alcanzados en la protección de los derechos humanos y la prohibición total del trabajo forzoso e infantil en el país.
“Millones de personas se vieron obligadas a recoger algodón en Uzbekistán durante un siglo. La mayor parte de la población (profesores y médicos, empresarios, trabajadores y empleados y, desgraciadamente, escolares y estudiantes universitarios) se movilizaron para recoger algodón todos los años, de septiembre a diciembre.
En el resultado, se anunciaron boicots al "algodón uzbeko" y el país estuvo en la lista negra durante años. Gracias a nuestra firme voluntad y determinación, ahora todo es historia. Nuestro pueblo ha sido completamente liberado de la esclavitud del algodón”, enfatizó el Jefe de Estado.
Como señaló el Presidente, una de las tareas estratégicas de Uzbekistán es desarrollar el capital humano y formar a una generación joven creativa.
En este sentido, en los últimos años se ha adquirido una experiencia considerable: el sistema educativo está experimentando transformaciones radicales. En los últimos seis años, la cobertura de la educación preescolar ha aumentado del 21% al 70% y la educación superior del 9% al 38%. Para 2030, se crearán las condiciones para que todos los niños accedan a la educación preescolar y para que la mitad de los graduados de la escuela secundaria obtengan educación superior.
El Jefe de Estado expresó su firme intención de seguir fortaleciendo la buena vecindad, la estabilidad, la cooperación y el desarrollo en Asia Central.
Gracias a los esfuerzos conjuntos, Uzbekistán logró solucionar los problemas de las fronteras estatales, los corredores de transporte y el uso del agua con todos sus vecinos.
“El comercio mutuo entre los países de la región se ha multiplicado por más de dos veces y media y el número de empresas conjuntas se ha quintuplicado. La región se ha convertido en un centro prometedor para el desarrollo económico, el transporte y el puente de comunicaciones que conecta el Este y el Oeste, el Norte y el Sur. Es seguro decir que nuestro pueblo se une en torno a un creciente sentido de identidad regional, y este sentido se está fortaleciendo aún más. No es sólo nuestra historia la que es común, sino también nuestro futuro y nuestros intereses vitales que son compartidos. ¡Ampliar nuestra cooperación regional es y será nuestra única opción!”, señaló Shavkat Mirziyoyev.
Se expresó confianza en que, con el apoyo de la comunidad internacional, Asia Central continuará por el camino de la unidad. En este sentido, transformar Asia Central en una región pacífica y próspera seguirá siendo un objetivo prioritario de la política exterior de Uzbekistán.
Se observó que en Asia Central, donde casi la mitad de la población pertenece a la generación más joven, las cuestiones de la juventud y la creación de oportunidades para realizar su potencial tienen la máxima importancia.
Por iniciativa del Presidente de Uzbekistán para fortalecer la cooperación en este ámbito, los países de la región firmaron recientemente un Acuerdo sobre la Dimensión Común de la Política de Juventud.
Para establecer una cooperación práctica en esta área con las Naciones Unidas y sus estructuras especializadas, se propuso crear un Grupo de Trabajo para promover el desarrollo de la juventud en Asia Central y desarrollar el programa “Agenda de la Juventud de Asia Central – 2030”.
Otra cuestión apremiante es la participación de las mujeres en la gestión de los asuntos de la sociedad y del Estado.
“El objetivo más noble de nuestra política nacional es garantizar a las mujeres la estabilidad familiar, la protección jurídica y una vida pacífica”, señaló el líder de Uzbekistán.
Se expresó interés en una mayor ampliación de la cooperación con ONU Mujeres. Como iniciativa conjunta se propuso celebrar el próximo año en Uzbekistán el Foro de Mujeres Asiáticas para discutir las cuestiones de la realización del potencial creativo de las mujeres y el intercambio de experiencias.
Señalando la aguda situación ambiental y la intensificación de la triple crisis planetaria causada por el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación ambiental, el Presidente señaló que Asia Central se está convirtiendo en una de las regiones más vulnerables al cambio climático.
Se presentaron los esfuerzos realizados por Uzbekistán para eliminar las consecuencias de la tragedia de Aral, datos sobre el impacto negativo del cambio climático en la región y la tendencia a la baja en la disponibilidad de agua.
Teniendo en cuenta esta situación, fue necesario establecer el cargo de Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para los Recursos Hídricos, una Plataforma de Tecnologías para el Ahorro de Agua en Asia Central y desarrollar una cooperación sistemática como parte del Programa de Desarrollo Verde adoptado por los países de la región. soportado.
“En este contexto, creo que sería conveniente introducir el Diálogo sobre el Clima en Asia Central. Presentamos una iniciativa para adoptar una resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas “Asia Central frente a las amenazas climáticas globales: solidaridad para la prosperidad común”. Proponemos discutir su contenido en el Foro Internacional sobre el Clima que se celebrará en Samarcanda el año próximo”, dijo el Presidente de Uzbekistán.
Se destacó que adaptar los principales sectores de la economía de Uzbekistán al cambio climático, lograr la neutralidad de carbono y aumentar drásticamente la proporción de energía verde sigue siendo una tarea estratégica.
El Jefe de Estado también se centró en intensificar los esfuerzos conjuntos para prevenir la propagación del extremismo y la radicalización de la juventud.
Se señaló que en el marco de la Estrategia Nacional de Lucha contra el Extremismo y el Terrorismo se presta especial atención a ayudar a las personas afectadas por ideas extremistas a volver a una vida normal y reintegrarse a la sociedad. La operación humanitaria “Mehr” (“Benevolencia”) se llevó a cabo cinco veces. Como parte de esa operación, más de 530 ciudadanos de zonas de conflicto fueron repatriados al país, principalmente mujeres y niños.
“En junio de este año, aquí en la Sede de las Naciones Unidas, la comunidad internacional conoció las historias de personas repatriadas a nuestro país y que emprendieron una nueva vida.
Para continuar las acciones en curso en esta dirección y promover un intercambio permanente de experiencias, hemos tomado medidas específicas para establecer el Consejo Regional de Expertos sobre el trabajo sistémico con personas repatriadas de zonas de combate bajo los auspicios de la Oficina de las Naciones Unidas contra el Terrorismo”, ha dicho el Presidente.
Además, el líder de Uzbekistán llamó a prevenir los casos de intolerancia religiosa e islamofobia que se observan últimamente en algunos países.
Para promover las ideas de tolerancia y armonía interreligiosas en el mundo, se propuso establecer un Centro Internacional para el Diálogo y la Cooperación Interreligiosos en Uzbekistán bajo los auspicios de la UNESCO.
“Estamos muy orgullosos de que nuestro país sea una patria de profundos eruditos y pensadores, como Al-Jorazmí, Al-Biruní, Ibn Sina, Imam Bujarí, Mirzo Ulugbek y Alisher Navoi, quienes hicieron contribuciones incomparables al desarrollo de la ciencia y la ciencia. Ha demostrado que el Islam es una religión de paz, conocimiento e iluminación”, destacó el Jefe de Estado.
Para estudiar la rica herencia de estos grandes eruditos y revelar al mundo la verdadera esencia humana del Islam, se propuso organizar la Conferencia Internacional "Islam: una religión de paz y bondad" en Uzbekistán en 2024.
Se destacó que la seguridad internacional está directamente relacionada con los procesos en Afganistán. En este país ha surgido una nueva situación que requiere enfoques especiales. Ignorar, aislar e imponer sanciones están empeorando la situación del pueblo afgano común y corriente.
Expresando la opinión de que la asistencia humanitaria al pueblo afgano no debería debilitarse, el Presidente pidió que se desarrollaran mecanismos apropiados para utilizar los activos internacionales congelados del Afganistán para abordar los graves problemas sociales de ese país.
“Necesitamos un Afganistán abierto, pacífico y sostenible, que participe activamente en iniciativas de cooperación regional y esté dispuesto a establecer asociaciones mutuamente beneficiosas con sus vecinos y otros países”, señaló el Jefe de Estado.
Desde la tribuna de la ONU, el Presidente de Uzbekistán instó a la comunidad internacional a unirse para resolver la cuestión de Afganistán y, bajo el liderazgo de las Naciones Unidas, desarrollar conjuntamente un enfoque flexible y constructivo al problema afgano.
Para concluir, se señaló que en este punto de inflexión de la historia, todos debemos considerar qué planeta dejaremos a las generaciones futuras: “Sólo a través de aspiraciones comunes y esfuerzos conjuntos se podrán lograr una paz y una prosperidad duraderas. Más que nunca, necesitamos confianza mutua, solidaridad y cooperación”.
Se reafirmó la disposición de Uzbekistán a profundizar una asociación amplia y de largo plazo con las instituciones de las Naciones Unidas y todos los Estados.