Presidente Shavkat Mirziyóyev: El Nuevo Uzbekistán Defiende la Solidaridad, el Diálogo Abierto y la Cooperación Estrecha con Todos los Países del Mundo

El 23 de septiembre comenzaron los debates generales de la 80ª sesión conmemorativa de la Asamblea General de la ONU en la sede de la organización en Nueva York, en los que intervino el Presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyóev, informó el corresponsal de la agencia «Dunyo».
Según el servicio de prensa del Jefe de Estado, en la primera jornada de los debates, dirigidos por la presidenta de la sesión Annalena Baerbock, participan el Secretario General de la ONU, António Guterres, los líderes de los Estados miembros —el Presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump; el Presidente de la República Federativa de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; el Presidente de la República de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan; el Presidente de la República de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa; el Presidente de la República de Corea, Lee Jae-myung; el Presidente de Francia, Emmanuel Macron—, así como jefes de Estado y Gobierno de otros países.
Al inicio de su intervención, el Presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyóev, felicitó sinceramente a los participantes por la 80ª sesión de la Asamblea General de la ONU. Señaló que la presente sesión se celebra en un contexto global en rápida transformación y complejo, que exige nuevas perspectivas y enfoques para la labor y el futuro de la Organización.
«Hoy observamos un debilitamiento del papel de las instituciones internacionales, el aumento de contradicciones, conflictos y guerras en el mundo, así como un crecimiento acelerado de la desigualdad tecnológica y social, y la intensificación de crisis económicas y humanitarias. Todo ello configura una nueva y preocupante realidad geopolítica», afirmó el Jefe de Estado uzbeko.
El líder uzbeko valoró altamente los esfuerzos del Secretario General António Guterres por preservar a la ONU como la principal plataforma para alcanzar soluciones de compromiso a cuestiones globales complejas y urgentes. Expresó su apoyo a las iniciativas de «ONU-80» y reafirmó el firme compromiso de Uzbekistán con el Pacto por el Futuro.
El Presidente de Uzbekistán también abogó por la transformación y ampliación del Consejo de Seguridad de la ONU con el fin de enfrentar de manera más eficaz los desafíos y amenazas contemporáneas y proteger los intereses de los países en desarrollo.
El Jefe de Estado destacó detalladamente los procesos de reformas irreversibles en Uzbekistán, implementadas en pleno cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Señaló que el país continúa de manera consistente la política de construcción de un Estado democrático, legal, social y laico: el Nuevo Uzbekistán.
«Nuestro objetivo principal es transformar radicalmente la vida de cada familia y de cada ciudadano del país, garantizando los derechos, la dignidad y el bienestar de las personas», declaró el Presidente de Uzbekistán.
Se indicó que en los últimos años se ha logrado reducir el nivel de pobreza en Uzbekistán del 35 % al 6,6 %. Esto se ha conseguido principalmente gracias a la reforma del sistema educativo y científico, la creación de sectores innovadores y empresas industriales tecnológicas, el desarrollo de energía «verde» y la modernización de la infraestructura de transporte, así como al apoyo integral a las pequeñas empresas, generando millones de empleos.
La cobertura de educación preescolar en el país aumentó del 27 % al 78 %, y la educación superior del 9 % al 42 %. Elevar el estatus y el prestigio de la profesión docente sigue siendo una prioridad fundamental.
Con el objetivo de crear una plataforma internacional única para el intercambio de experiencias y conocimientos de los docentes, se propuso celebrar en Uzbekistán una Cumbre Mundial de Educación Profesional.
Al abordar la creación de un sistema sanitario avanzado, el líder del país anunció que, por iniciativa uzbeka, se celebrará un evento de alto nivel en la sede de la ONU dedicado a la lucha contra el cáncer infantil y otras enfermedades graves.
En relación con la política de género, el Presidente afirmó que se seguirá aumentando el papel de las mujeres en la vida social, política y empresarial del país. En este contexto, abogó por la celebración periódica del Foro de Mujeres de Asia a escala regional, convirtiéndolo en una plataforma permanente.
Destacando el compromiso decidido de Uzbekistán con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el Presidente señaló que para 2030 el país aspira a ingresar en la categoría de ingresos medios-altos.
Se prestó especial atención a las prioridades de la política exterior de Uzbekistán. El líder señaló: «Hace ocho años, desde este alto podio, declaramos nuestra firme determinación de transformar Asia Central en un espacio de paz, buena vecindad y cooperación. Hoy podemos afirmar con satisfacción que hemos alcanzado este objetivo estratégico. La era de fronteras cerradas, disputas sin resolver y conflictos ha quedado atrás».
Se observó que en los últimos años el comercio mutuo, las inversiones y el transporte en la región se han multiplicado por cinco. Se están creando fondos de inversión conjuntos, zonas de comercio fronterizo y cooperación industrial, y se están implementando grandes proyectos de infraestructura.
Los encuentros consultivos de los jefes de Estado de Asia Central han resultado un mecanismo eficaz para profundizar la integración regional.
«Puedo afirmar con certeza que hoy ha comenzado el proceso de formación de la Nueva Asia Central. Gracias a su cohesión, estabilidad e identidad regional creciente, ocupa un lugar cada vez más firme en el sistema de relaciones internacionales como un actor independiente», declaró el Presidente de Uzbekistán.
El Jefe de Estado propuso implementar conjuntamente con las estructuras de la ONU una serie de nuevos proyectos y programas en la región, incluyendo la celebración de un foro internacional bajo los auspicios del ECOSOC y la UNCTAD sobre el desarrollo económico de los Estados de Asia Central; la creación, junto con la UNIDO, de un hub regional de tecnologías «verdes» en la industria; la adopción de programas para el uso racional de los recursos hídricos en la región, la formación de espacios «verdes» y la garantía de sostenibilidad demográfica.
Asimismo, se promovió la adopción de una resolución de la Asamblea General de la ONU en apoyo a los esfuerzos de los países de Asia Central para profundizar la asociación regional y la integración económica.
En el contexto de la seguridad global y regional, el Presidente de Uzbekistán abordó la situación en Afganistán. Para apoyar la aspiración del pueblo afgano a una vida pacífica y tranquila, hizo un llamado a la cooperación de la comunidad internacional, subrayando especialmente la importancia de evitar el aislamiento de este país.
Se indicó que Uzbekistán planea implementar en Afganistán grandes proyectos económicos e infraestructurales. El líder uzbeko propuso la adopción de una resolución de la ONU sobre el desarrollo de corredores internacionales de transporte y energía que atraviesen Afganistán.
Al referirse a la creciente crisis humanitaria en la Franja de Gaza, el Presidente hizo un llamado al cese de las hostilidades y a la continuación de las negociaciones políticas.
«Defendemos firmemente el principio de ‘dos Estados para dos pueblos’, de conformidad con las resoluciones de la ONU», afirmó desde el alto podio de la organización.
Expresando seria preocupación por la situación en torno a Ucrania, acogió con satisfacción el inicio de un diálogo de alto nivel para su resolución mediante medios diplomáticos.
Continuando con el tema de la seguridad, el Jefe de Estado destacó la implementación eficaz de la Estrategia Global Antiterrorista en Asia Central. Se propuso transformar el Consejo Regional de Expertos en Rehabilitación y Reinserción, creado en colaboración con la Oficina Antiterrorista de la ONU, en un Centro Internacional de Competencias, que servirá como plataforma para compartir experiencias de reintegración de personas retornadas de zonas conflictivas.
El Presidente también expresó su disposición a crear las condiciones necesarias para la apertura en Uzbekistán de una oficina regional de la Oficina Antiterrorista de la ONU.
El líder subrayó que la vulnerabilidad del sistema de transporte global en el mundo actual afecta negativamente la estabilidad de los países en desarrollo sin salida al mar. Para garantizar la seguridad de los corredores de tránsito internacional y crear cadenas logísticas eficientes, propuso implementar el Mecanismo Global de «Fortalecimiento de la Conectividad del Transporte para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible».
El Presidente de Uzbekistán también abordó la problemática del cambio climático, que adquiere un carácter cada vez más agudo. Destacó que las consecuencias negativas de la desecación del Mar de Aral deben permanecer en el centro de la atención de la comunidad internacional.
«Estamos llevando a cabo un trabajo activo para restaurar el ecosistema del área del Aral. En los últimos años, se han plantado especies de plantas resistentes a la sal en 2 millones de hectáreas del lecho seco del Mar de Aral. Para 2030, hasta el 80 % de todo el territorio estará cubierto de vegetación», indicó el Jefe de Estado.
Al abordar el problema de la escasez de recursos hídricos, anunció planes para celebrar en Uzbekistán un Foro Mundial sobre Conservación del Agua. Al final del evento, se espera definir la crisis hídrica como una seria amenaza para el desarrollo sostenible y adoptar una «hoja de ruta» para la implementación de tecnologías innovadoras a nivel global.
Otro efecto negativo del cambio climático señalado por el Presidente es el aumento de la migración climática, destacando la ausencia de mecanismos internacionales concretos y de un marco jurídico para abordar este problema. En este sentido, abogó por la adopción de un Pacto Global de amplia cooperación internacional y la coordinación de políticas para enfrentar esta grave cuestión.
En el contexto del desarrollo sostenible de todos los países, el Presidente de Uzbekistán destacó la importancia de reducir la brecha digital entre naciones y mejorar el uso de la inteligencia artificial. En este ámbito, se propuso crear un mecanismo internacional de cooperación para el intercambio gratuito de soluciones prácticas y modelos de IA en salud, educación y cultura.
«Me gustaría referirme a otra cuestión prioritaria. El futuro y el bienestar del mundo están en manos de las nuevas generaciones. Nuestra tarea inmediata es inculcar en la juventud ideas nobles de paz, humanismo, amistad, confianza y respeto mutuo», afirmó el líder de Uzbekistán.
En este contexto, propuso la creación del Movimiento Mundial de Jóvenes por la Paz, con sede en Uzbekistán.
El Presidente señaló que, al implementar de manera constante una política de tolerancia social, Uzbekistán continuará promoviendo ampliamente en el mundo las ideas del islam ilustrado. En los próximos meses se inaugurará en Taskent un Centro único de Civilización Islámica, previsto como referente regional. Se planea organizar en la ONU una presentación especial del rico legado espiritual y científico de grandes sabios y pensadores como el Imam Bujari, el Imam Termizi y el Imam Maturidi.
Para concluir su intervención, Shavkat Mirziyóev afirmó que el Nuevo Uzbekistán defiende la solidaridad, el diálogo abierto y la cooperación estrecha con todos los Estados del mundo, y está dispuesto a contribuir al fortalecimiento del diálogo entre pueblos, culturas y civilizaciones, y al logro de los objetivos de la humanidad.